¿Qué es la lateralidad cruzada?

El cerebro está dividido en dos hemisferios, cada uno de estos se encarga de unas funciones determinadas.  El hemisferio izquierdo es la zona que realiza el procesamiento verbal, lógico y secuencial mientras que el hemisferio derecho es más intuitivo, creativo, se encarga de realizar relaciones espaciales. Normalmente los diestros tienen una dominancia del hemisferio izquierdo y en el caso de los zurdos es el hemisferio derecho. A través de este funcionamiento se puede diferenciar varios tipos de lateralidad entre las que resaltaré dos:

• -     Lateralidad homogénea: se da cuando mano, ojo, oído y pie tienen el mismo lado dominante, sea izquierdo o derecho.
• -          Lateralidad cruzada: tiene lugar cuando la dominancia del lado es distinta para ojo, pie, mano u oído.

Existen varios aspectos que influyen en el desarrollo de una buena organización lateral como son la información genética, el ambiente, la educación o la influencia de las distintas actividades que desarrolla durante el proceso de maduración.

Algunos de los síntomas que muestran que el menor sufre una lateralidad cruzada es:

-          Lentitud en el trabajo académico.

-          Dificultades en la lectura y escritura

-          Dificultad en las matemáticas y cálculo

-          Torpeza psicomotriz

-          Lee muy lento y realiza pautas.

-          Problemas de organización tanto tiempo como espacio.

Hay que saber que dependiendo del momento de desarrollo del niño alguno de estos aspectos puede ir mejorando, evolucionando y corrigiéndose.

Si vemos que nuestro hijo cumple alguna de estas características, anteriormente mencionadas, podemos hacer que realice algunas actividades que ayudarán a un mejor desarrollo de sus características como son: hacer objetos con plastilina, seguir laberintos con lápiz, todo tipo de juegos donde intervenga el oído, la vista y ejercicios que requieran una destreza motriz.

Para determinar si es real que nuestro hijo sufre lateralidad cruzada debemos ir a un profesional el cual le realice una serie de pruebas objetivas que determinen si esta afirmación es cierta o no.

Tras el diagnóstico del profesional este elaborará un conjunto de actividades y procesos de intervención con los que desarrollar aquellos aspectos que el menor tenga menos desarrollados para poder solventar las dificultades que se derivan de una lateralidad cruzada.